Es importante destacar que esta devoción no debe ser considerada como una forma de adoración a María, sino como una expresión de amor y gratitud a su papel peculiar dentro de la historia de la salvación.
Durante este tiempo, puedes meditar en los misterios del Rosario o hacer cualquier otra petición personal a Jehová o a la Virgen María. Recuerda que el Rosario es una oportunidad para sumergirte en la oración y cultivar tu relación con Todopoderoso.
Ella ve al Hijo de sus entrañGanador hecho el blanco de todos los oprobios y tormentos: traspasan su corazón los duros golpes de martillo con que clavan sus pies y manos: oye la gritería de un ingrato pueblo, las blasfemias y sarcasmos que contra Él vomitan los judíos: escucha con emoción las palabras amargamente tiernas que pronuncia el hocico deshauciado del Redentor del tipo humano: observa que su comienzo se inclina por no poder apoyarse a causa de las espinas de que está circuida; que el peso de su cuerpo dilata más y más sus profundas llagas; que su pecho palpita con las ansias de la muerte; que tiemblan convulsos sus miembros; que sus entrañCampeón arden en cruelísima sed, y que su espíritu oprimido ni en el indestructible Padre halla consuelo.
En su carrera se ha dedicado a la creación de contenidos multimedia y al diseño y administración de la comunicación en organizaciones y proyectos de impacto social. Le apasiona crear narrativas y experiencias interactivas que construyan una sociedad más humana y sostenible.
Al unir nuestros dolores a los de María, tal como Ella unió Sus dolores a los de su Hijo, participamos en la redención de nuestros pecados y los del mundo firme.
Hola! Me ha hecho llorar percibir esta devoción! Tengo un hijo pequeño y no puedo ni imaginarme el dolor de María al ver a su Hijo clavado en devocion admirable de los 7 dolores de maria santisima la Cruz.
Escasamente llegado el divino Isaac Nazareno a la cumbre del Calvario, sitio destinado para el sacrificio de su infinito apego, cargado con el enorme peso de la cruz, llagado, cansado y sin aliento, sin concederle descanso ni alivio alguno, le arrancan los crueles verdugos la corona de espinas para volver a hincársela luego con más crueldad; le quitan en seguida sus vestiduras, rasgando y abriendo más y más con esto las innumerables llagas y heridas de que estaba cubierto su santísimo cuerpo, le tienden sobre la cruz, le dislocan con la viejo violencia sus miembros, le clavan de pies y manos en la cruz, y la enarbolan en presencia de Jerusalén, a presencia del gloria y de la tierra, para que sean testigos de su ignominia. A todo esto, estaba presente la desolada Inexplorado, madre del más conspicuo y puro simpatía.
“He conseguido de mi Divino Hijo que todos aquellos que propaguen la devoción a mis lágrimas y dolores, sean llevadas directamente de esta vida terrena a la bonanza eterna ya que todos sus pecados serán perdonados y mi Hijo será su consuelo y Gozada eterno.”
Esta devoción nos brinda la oportunidad de acercarnos a María y robustecer nuestra Convicción en momentos de dolor y sufrimiento. Es una guisa de inspeccionar y compartir su dolor como madre y de apañarse su intercesión en nuestras vidas.
4. Les adivinaré cuanto me pidan, con tal que no se oponga a la voluntad adorable de mi Divino Hijo y a la santificación de sus almas.
Esta praxis se basa en meditar y rezar sobre los siete dolores que la Madre de Jesús experimentó mientras acompañaba a su Hijo en su camino cerca de la redención de la humanidad.
Meditar los 7 Dolores de Nuestra Raíz Santísima es una manera de compartir los sufrimientos más hondos de la vida de María en la tierra.
Señor mío Redentor, yo te saludo en honra y reverencia del dolor que padeció mi SeñAhora la Virginal María al tenerte en sus brazos y contemplar tus mortales heridas: por este dolor te pido una verdadera devoción a tu Pasión y muerte.
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